Compré unas pechugas de pollo empanadas que me dijeron que al horno quedaban estupendas. Ya sabéis, por aquello de las grasas, así lo hice.¡¡¡ No podían estar más secas!!! Así que para arreglarlo le puse un poco de tomate que había frito para los macarrones y queso semicurado y de cabra.¡ Al horno otra vez!¡ Menudo cambio! Buenísimas.
De todas formas aconsejo empanar las pechugas, en lugar de comprarlas empanadas.
Y, por su puesto, se puede hacer con las pechugas sin empanar o con otro tipo de carne.
Ingredientes:
4 filetes de pechuga gorditos
Tomate frito casero
4 lochas de queso semicurado
8 medallones de queso de cabra
azúcar
orégano
sal
huevo
pan rallado
aceite
Preparación.
Primero hay que empanar las pechugas. Salpimentar y pasar por huevo y pan rallado.
Se pueden preparar las pechugas fritas o al horno, en este caso un chorrito cortito de aceite por ambos lados y al horno a 180º.
Se deja en el horno unos 20 minutos y se saca la bandeja.
Se les da la vuelta a los filetes y se pone encima de cada uno de ellos 2 cucharadas de tomate frito.
Se espovorea un poco de orégano y se pone el queso semicurado y los medallones de queso de cabra.
Encima del queso de cabra se pone un poco de azúcar.
Volver a meter en el horno con el grill tambien para que gratinen los quesos.
Si veis que se va a tostar mucho por abajo, apagar el horno y dejar sólo el grill.
Si las pechugas las habéis hecho fritas, solo hay que añadir el tomate, orégano y quesos y al horno a gratinar.
Ya veis la pinta que tienen!
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